Denna se volvió, y su rostro se ilumino al verme.
- ¿Si?
- Normalmente nunca abordaría así a una mujer, pero no he podido evitar fijarme en que tiene usted los ojos de una dama de la que una vez estuve locamente enamorado.
-Es una pena amar solo una vez. He oído decir que hay hombres que consiguen amar dos veces, e incluso mas.
- Yo solo he delirado una vez. Nunca volveré a enamorarme
- ¡Pobre hombre! Esa mujer debió de hacerle mucho daño.
- Cierto, me hirió de varias maneras
- Pero eso tan solo era de esperar. ¿Como no iba a amar una mujer a un hombre tan apuesto como usted?
- No lo se. Pero creo que no me amaba, porque me atrapo con una sonrisa adorable y luego desapareció sin decir palabra. Como el rocio bajo la débil luz del amanecer.
- Esa mujer debía de ser verdaderamente maravillosa para enamorarlo tanto.
- Era incomparablemente maravillosa..
El temor de un hombre sabio
Patrick Rothfuss
No hay comentarios:
Publicar un comentario